Ir al contenido principal

"Melancolía", Leopoldo Lugones

Leopoldo Lugones






A la hora en que a la tarde le aparecen ojeras,

Cuando aquieto mis pasos por las tristes riveras
Donde entre brumas lilas esfúmanse las naves,
Y afligen como adioses los vuelos de las aves,
Que afrontan lejanías hondas como la muerte;
Cuando el sol moribundo sangre pálida vierte
En la imperial fatiga de su grandeza inútil;
Cuando el amor es necio; cuando la gloria es fútil;
Cuando la misma pena, por el cansancio trunca,
Conoce el desconsuelo de no revivir nunca;
Cuando en el pecho amagan incurables dolencias;
Cuando en el alma hay naves que preceden ausencias:
Lo que en ambos fue dicha reza en mí una plegaria.

Vístese de heliótropo la tarde solitaria;

Los pensativos sauces despídense del día
Con un desasosiego tal, que se creería
Hallar bajo cada uno de los sauces aquellos,
Una huérfana pálida de lánguidos cabellos.

Algo tuvo que gime flota en el oleaje

Taciturno, y agrava la inquietud del paisaje.
Y estoy tan triste, tanto, que ni llorarte puedo;
Pues bajo esa nostalgia que se acurruca en miedo,
No sé por qué inconclusa sugestión de las brisas,
Sufro, y las mismas lágrimas se me vuelven sonrisas.




________________________

Género literario: Poesía

País: Argentina

Comentarios

Entradas populares de este blog

"Tengo estos huesos hechos a las penas", Miguel Hernández

Tengo estos huesos hechos a las penas y a las cavilaciones estas sienes: pena que vas, cavilación que vienes como el mar de la playa a las arenas. Como el mar de la playa a las arenas, voy en este naufragio de vaivenes, por una noche oscura de sartenes redondas, pobres, tristes y morenas. Nadie me salvará de este naufragio si no es tu amor, la tabla que procuro, si no es tu voz, el norte que pretendo. Eludiendo por eso el mal presagio de que ni en ti siquiera habré seguro, voy entre pena y pena sonriendo.                         _______________________________ Miguel Hernández (1910-1942), gran poeta español, de un lirismo vigoroso. ________________________________ Letras de acá y de allá. Blog de literatura.

"¡Ah de la vida!...", Francisco de Quevedo

Francisco de Quevedo “¡Ah de la vida!”… ¿Nadie me responde? ¡Aquí de los antaños que he vivido! La Fortuna mis tiempos ha mordido; las Horas mi locura las esconde. ¡Que sin poder saber cómo ni a dónde la salud y la edad se hayan huido! Falta la vida, asiste lo vivido, y no hay calamidad que no me ronde. Ayer se fue; mañana no ha llegado; hoy se está yendo sin parar un punto: soy un fue, y un será, y un es cansado. En el hoy y mañana y ayer, junto pañales y mortaja, y he quedado presentes sucesiones de difunto. ___________________________________________________ Poesía española de los Siglos de Oro. Fanccisco de Quevedo. Soneto.

"Cosas, Celalba mía, he visto extrañas", Luis de Góngora

Cosas, Celalba mía, he visto extrañas: cascarse nubes, desbocarse vientos, altas torres besar sus fundamentos, y vomitar la tierra sus entrañas; duras puentes romper, cual tiernas cañas, arroyos prodigiosos, ríos violentos, mal vadeados de los pensamientos, y enfrenados peor de las montañas; los días de Noé, gentes subidas en los más altos pinos levantados, en las robustas hayas más crecidas. Pastores, perros, chozas y ganados sobre las aguas vi, sin forma y vidas, y nada temí más que mis cuidados. _______________________________ Luis de Góngora y Argote (1561-1627), uno de los grandes sonetistas de la lengua española; a partir de su estilo rebuscado se creó el adjetivo gongorino. ________________________________ Letras de acá y de allá. Blog de literatura.